Mil veces

Me rozaste la vida mil veces
pero siempre te equivocabas,
temías abandonar tus pisadas
para en el camino olvidarlas.

Y así huiste mil veces
para regresar otras tantas,
dejando tus huellas tan lejanas
que la vida que pensaste ya no era tuya.

Y yo te quise mil veces
y te dejé volver otras tantas,
y te vi marchar esas mismas
hasta que mis ojos dejaron de mirar.

Me rozaste la vida mil veces
pero siempre me equivocaba,
temía encontrar mis pisadas
para que otro camino tomaran.

iñaki navarlaz rodríguez

Cajón desastre

*Imagen https://pixabay.com/users/snapwiresnaps-692569/