En mis vísceras se esconden
mis sentimientos más perversos,
aquellos, que si flotasen entre corrientes
destruirían mi alrededor más acomodado.
Así, de mi corazón apretado
ya sólo brotan flores que en marchitarse
gastan las horas que van
de las palabras a las miradas perdidas.
Ahora, en este momento que se alarga
lo que dura un sueño me he arrancado las tripas,
me he puesto alas para saltar al vacío
y aterrizar de nuevo en la vida.
iñaki navarlaz rodríguez
Desencuentros
*Imagen de manolofranco