El rumbo lo marca el viento, ése que construye en el cielo los huracanes que nos desarbolan, ése que va derrumbando las montañas que nos enseñan el horizonte, el que vemos y a veces no queremos ver.
Ese rumbo se va perdiendo poco a poco, en silencio, escondido en las sombras que nos pisamos, que perseguimos siempre y sólo desaparecen cuando se apagan las luces, cuando la mirada se convierte en cristal.
iñaki navarlaz rodríguez
Manifiesto
*Fotografía tomada el 17/07/2017 en Islas Cíes (propia)