Esas noches no son para vivir,
son mares de carne emborrachada,
columnas que sostienen el vacío;
son colores vestidos de transparencia,
soledad entre la multitud…
Esas noches están huyendo del sueño,
son cruceros a las playas del infierno,
cigarros que arrastran el pensamiento;
son callejones de caricias,
palabras en un diccionario equivocado…
Esas noches esconden besos que no quise evitar,
son huéspedes de la niebla entregada,
calores que yermos me permiten sufrir;
son mariposas desaladas,
razones del corazón que la razón desconoce…
Iñaki Navarlaz Rodríguez
Imagen de Pexels (fuente Pixabay)